El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) presentó los resultados de la Encuesta Nacional de Victimización y Percepción sobre Seguridad Pública (ENVIPE) 2024, revelando datos alarmantes sobre la percepción de inseguridad en México. De acuerdo con el estudio, el 73.6% de la población mayor de 18 años considera que vivir en su entidad federativa es inseguro debido a la delincuencia, aunque esta cifra representa una leve disminución en comparación con 2022.
La encuesta, realizada entre marzo y abril de 2024, muestra una mejora en la percepción de seguridad a nivel municipal, con una reducción significativa en las cifras. Sin embargo, la inseguridad persiste a nivel de colonia o localidad, donde el 62.5% de la población se siente vulnerable en su municipio y el 40.2% en su vecindario.
Morelos, Guanajuato y Zacatecas se posicionan como los estados con la mayor percepción de inseguridad, alcanzando cifras de 90.1%, 87.5% y 87.4%, respectivamente. En contraste, Baja California Sur (30.1%), Yucatán (30.6%) y Coahuila (37.6%) son las entidades donde los ciudadanos se sienten más seguros.
En cuanto a la confianza en las autoridades encargadas de la seguridad pública, la Marina y el Ejército mantienen una sólida posición, con un 89.3% y un 86.7% de confianza entre la población. No obstante, persiste una percepción negativa hacia las policías municipales y de tránsito, especialmente entre las mujeres, quienes reportan mayor desconfianza en estas corporaciones.
El panorama en cuanto a la victimización es igualmente preocupante. En 2023, el 27.5% de los hogares en México reportó que al menos uno de sus integrantes fue víctima de un delito, lo que equivale a 10.6 millones de hogares. Este porcentaje se mantiene sin cambios significativos en comparación con 2022. Asimismo, se estimó un total de 31.3 millones de delitos, con una tasa de 33,267 delitos por cada 100,000 habitantes, superando las cifras del año anterior.
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A pesar del incremento en la incidencia delictiva, el 92.9% de los delitos no se denunció, lo que refleja una profunda desconfianza en las instituciones de justicia. Entre las principales razones para no denunciar, la población señaló la pérdida de tiempo y la desconfianza en las autoridades, lo que subraya la urgencia de reformas que fortalezcan el sistema de seguridad y justicia en el país.
La ENVIPE 2024 pone de manifiesto que, si bien se han logrado avances en la reducción de la percepción de inseguridad en algunos ámbitos, el desafío sigue siendo monumental, con cifras alarmantes de victimización y una falta de confianza en las instituciones. Esto requiere una respuesta coordinada por parte de los tres niveles de gobierno, con el fin de garantizar la seguridad y restaurar la confianza ciudadana en las autoridades.
