Preocupado por la seguridad de sus vecinos en la Cuauhtémoc, el diputado local del PAN, Aníbal Cañez Morales, busca que el gobierno de Martí Batres retire los cables en desuso sobre el espacio público de la alcaldía.
El panista recordó que, en julio de este año, se estableció un compromiso por parte del gobierno capitalino con la Cámara Nacional de la Industria Electrónica de Telecomunicaciones y Tecnologías de la Información (CANIETI), así como con la Asociación Nacional de Telecomunicaciones (ANATEL), pero no han existido avances notables en las calles de la Ciudad.
El diputado por Cuauhtémoc, precisó que, en esta demarcación, no se han notado avances, pues en colonias como la Guerrero, San Simón Tolnahuac, Morelos o en Hipódromo, Condesa y Roma, el problema del cableado en desuso sigue siendo un factor de riesgo para las y los vecinos que habitan ahí.
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Además, el mecanismo que se está privilegiando para el retiro de cables en desuso es por medio del Sistema Unificado de Atención Ciudadana (Suac), lo que hace que se saturen los sistemas o que no se le dé la atención pertinente por la gran cantidad de folios.
“Necesario y urgente que la Alcaldía adopte su obligación constitucional en materia de obra pública, desarrollo urbano y servicios públicos, elaborando un programa integral de retiro por zona o por colonia y mejorar la imagen de las 33 colonias de la demarcación territorial”.
De acuerdo a Protección Civil CDMX, las emergencias atendidas por el Cuerpo de Bomberos por cables caídos superan las fugas de gas natural, volcaduras, flamazos, fugas de agua e inundaciones, ya que, del 1 de enero al 15 de junio de 2023, de las 24 mil 560 emergencias atendidas, 588 corresponden a cables caídos en la vía pública.
“Es una propuesta loable y es una propuesta que emana de gestiones vecinales que se van recogiendo en mis recorridos por la Cuauhtémoc, donde he sido testigo de cables caídos a mitad de las calles y causan conflicto con los transeúntes o automovilistas”.
Con esta propuesta, también se estaría combatiendo a los “diablitos” que son puestos comerciantes que roban energía eléctrica al Estado y eso también es peligroso tanto para quienes ejercen esta actividad ilegal como para la gente que transita por ahí.
