“Juntas somos Fuego” o “Somos el grito de las que ya no están”, son algunas de las consignas que se podían escuchar hoy a lo largo de la marcha por el Día de la Mujer, la cual comenzó poco después de las 2 de la tarde, con una afluencia mucho menor que en años anteriores, debido a la situación de emergencia que estamos viviendo.
Aún y con todo, ni la pandemia ha podido impedir que las mujeres, madres, hermanas e hijas de víctimas de feminicidios, violaciones, desaparecidas, etc, así como cientos de mujeres a lo largo de todo el día, se reunieran en el zócalo capitalino y en diversos puntos de la ciudad para gritar basta ya a la violencia de género y a la impunidad.
La marcha se produjo pacificamente en la mayor parte de su recorrido, aunque también se produjeron destrozos a ventanas, escaparates y bancos, especialmente en la Calle Juárez y al final de la marcha grupos reducidos alcanzaron a tumbar las vallas que rodeaban el Palacio Nacional, donde al cierre de este artículo, continúan las protestas.
Por disposición de Claudia Sheimbaum, se movilizaron durante el día de hoy más de 700 policiás mujeres y 600 del grupo Atenea. Esta Unidad Táctica de Auxilio a la Población de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) de Ciudad de México está integrado por 460 mujeres que tratan de garantizar la seguridad de los ciudadanos en manifestaciones, marchas y concentraciones masivas.
Por otro lado, Anmistia Internacional ha denunciado anteriormente un uso de fuerza excesivo durante enfrentamientos de las fuerzas del Estado con manifestantes, y ha expresado su deseo de que no se repitan durante la jornada de hoy.
CSG
