Si hay un torneo sobre tierra batida en el que Novak Djokovic se siente especialmente cómodo, ese es el Internazionali BNL d’Italia. No obstante, en Roma ha fijado una estadística excepcional: ya son 17 años consecutivos alcanzando los cuartos de final.
Este martes se presentó entre los ocho mejores de este ATP Masters 1000, después de batir al cabeza de serie No. 13 Cameron Norrie por 6-3, 6-4, en una hora y 30 minutos.
Desde que Nole participó por primera vez en la capital italiana en 2007 siempre ha llegado, como mínimo, a cuartos de final. Es un torneo en el que registra un récord de 67 victorias en 77 partidos disputados (87%) y se ha presentado en la final en 12 ocasiones (6-6).
Esta vez en cuarta ronda, el balcánico tenía al otro lado de la red a uno de los jugadores más en forma esta temporada en la superficie más lenta. Campeón en el ATP 500 de Río de Janeiro y finalista en el ATP 250 de Buenos Aires, Norrie era una de las raquetas con más victorias en tierra (14) este año.
Sin embargo, Djokovic supo sofocar cualquier intento de rebelión desde el inicio. Enlazó tres juegos consecutivos —gracias a uno de los tres quiebres que consiguió en el partido— y conservó la ventaja para cerrar el set inicial por 6-3 en 40 minutos; el segundo no tuvo diferencia alguna y proporcionó su mejor tenis para quedarse con el boleto a la siguiente ronda.
Djokovic se medirá en cuartos de final a una de las estrellas emergentes del ATP Tour, el danés cabeza de serie No. 7 Holger Rune, que superó en la Grand Stand Arena al australiano procedente de la fase previa Alexei Popyrin por 6-4, 5-7, 6-4 en tres horas.
Rune avanzó a cuartos de final de un torneo ATP Masters 1000 por tercera vez en sus últimas seis participaciones (París 2022, Montecarlo 2023 y Roma 2023).
Será la tercera vez que Djokovic y Rune se midan en la pista. En el último duelo que registra el ATP Head2Head en la final del ATP Masters 1000 de París 2022, fue el danés quien se quedó el título, el primero de su carrera en esta categoría, por 3-6, 6-3, 7-5.
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