El pasado 30 de septiembre el periodista Carlos Loret de Mola, en su programa «Latinus», dio a conocer que un grupo de hackers, autodenominados “Guacamaya”, pudieron acceder a información de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), logrando un hackeo masivo mismo que sacó a la luz algunos de los más polémicos asuntos de seguridad que ha enfrentado esta administración.
Tras una búsqueda en más de cuatro millones de correos electrónicos de la Sedena que fueron otorgados a El Universal por el grupo de hacktivistas se encontró que la Sedena ha trabajado en la creación de una nueva aerolínea incluyendo una flotilla de 10 aviones arrendados, con el propósito de que brinde servicios de transporte de pasajeros y de carga.
De acuerdo a correos electrónicos enviados desde la cuenta institucional, la nueva aerolínea pública tendría un costo operativo y administrativo anual entre mil y mil 800 millones de pesos. El costo podría modificarse dependiendo el modelo de aeronaves que se elijan, así como Airbus A320, Boeing 737 o ATR-72.
Incluso, la Sedena analizó la posibilidad de explotar comercialmente el avión presidencial a través de una aerolínea publica, después esta opción fue considerada con «alto riesgo de obtener resultados deficitarios». Para obtener ganancias la renta del avión por una hora tendría que tener un costo de 500 mil pesos.
La opción de uso comercial fue descartada, y se propuso un uso militar, lo que implicaría vuelos de ayuda humanitaria, misiones consulares y diplomáticas, asa como viajes de estudios nacionales y al extranjero, y trasporte de delegaciones deportivas, entre otros.
De acuerdo con la información, el grupo Olmeca-Maya-Mexica se enfrenta a un problema legal: no puede tener la concesión de un aeropuerto y de una aerolínea al mismo tiempo. Esto lo piensan resolver a través de una reforma al reglamento de la ley de aeropuertos, sin pasar por el Poder Legislativo.
Adicional, la secretaría ha contemplado la creación de una empresa turística, la cual tendrá la tarea de administrar el museo del Mamut y Subacuático de Tulum y los parques nacionales La Plancha y del Jaguar. Estos proyectos son impulsados por una empresa pública creada por la Sedena, denominada Grupo Aeroportuario, Ferroviario y de Servicios Auxiliares Olmeca-Maya-Mexica (GAFSOMM).
La nueva empresa turística que se suma al grupo se llamará Servicios Turísticos Itzamná, S.A. de C.V.” y operará los desarrollos hoteleros Nuevo Uxmal, Plan de San Luis y cuatro Eco-Hoteles que estarán distribuidos en las estaciones del Tren Maya.
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NILY
